#Opinión Ricardo Moreno
Falta de voluntad para resolver los problemas de la capital del Estado de México saltan a la vista. La infraestructura está totalmente abandonada y no hay planes de mantenimiento que den respuesta a la enorme demanda que se ha acumulado.
Durante más de 10 años las calles de la capital siguen en el abandono y llenas de agujeros y baches.
La movilidad en Toluca es fatal, entre otras cosas, porque los pavimentos están profundamente dañados y hacen imposible que los vehículos e, inclusive los transeúntes, puedan circular en condiciones medianamente satisfactorias. La situación se torna delicada en la ciudad pero es grave en las comunidades del municipio.
No hay asomo de que esto se revienta en los próximos meses. Antes al contrario, el próximo mes de junio iniciará la temporada de lluvias y con ellas vendrán más cráteres y hoyos. No existe un auténtico plan para revertir esta situación debido al alto costo que significará reconstruir calles y avenidas.
No hay solución porque se prioriza la política pública de la distracción contratando artistas en lugar de invertir en la infraestructura de la ciudad. Debemos poner un alto al envejecimiento acelerado de la infraestructura vial de Toluca. Este es un llamado urgente.
