La discapacidad solo existe en la mente de las personas y ello lo demuestra Alexandro Pérez Salamanca, quien desarrolló un don especial que le permite junto con su padre, demostrar a Puebla de lo que están hechos a través del programa de artistas urbanos del Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla (IMACP).
Jesús Lemus
Tiene 12 años y nació con autismo; poco a poco desarrolló un estrabismo cerebral que le quitó el don de la vista.
Junto con su papá, se convirtieron en artistas urbanos que dependen de las calles del Centro de Puebla, para ganarse honradamente una moneda que los ayude a sortear los gastos del hogar.
Alexandro, está enamorado de la música, y lo demuestra con las canciones que sirven para deleitar a los poblanos que lo escuchan y lo ven.
Sabe que no puede ver a su público por la discapacidad que tiene, pero sus aplausos le ayudan a entender, que su discapacidad no existe en su vida y saldrá adelante con el apoyo de Dios y con su voz.
Su papá, Alejandro Pérez, dijo que Dios le cambió el don de la vista a su hijo por el don de la música, convirtiéndose en la mejor manera de entender el mundo que lo rodea.
Ambos acudieron con especialistas y la ilusión de recibir un diagnostico favorable para que Alexandro Pérez recupere la vista, pero lamentablemente, según los doctores, no hay forma de que vea otra vez.
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Los dos se encuentran en fines de semana sobre la 5 de Mayo entre la 2 y 4 poniente, donde instalan una bocina que reproduce las melodías de inmortal Juan Gabriel y que son interpretadas para los poblanos.