Tulancingo de Bravo, Hidalgo.- El tramo de la ciclopista que cruza por la central de abastos de Tulancingo ya es usado cotidianamente para dejar basura, de acuerdo a denuncias de vecinos, así como usuarios de la vialidad.
Señalaron que ya han realizado la denuncia en varias ocasiones ante las autoridades para evitar que se siga registrando la situación, así como para sancionar a los responsables.
Hasta el momento no han conocido de alguien que haya sido sancionado, señalando que la muestra de ello es que se sigue dejando basura en la ciclopista.
Dicha vialidad fue construida en el año 2014 como una extensión del Sendero Intermunicipal, con intención de que ciclistas y peatones contaran con una vialidad adecuada para transitar, sin riesgos para su integridad.
La ciclopista es poco usada hasta la fecha como vialidad alternativa, debido a complicaciones para circular por la zona, incluso para vehículos automotores.
Por lo que los comerciantes de la zona comenzaron a usarla para dejar basura; incluso en varias ocasiones han instalado carpas para la promoción de productos, además de usarla como estacionamiento de vehículos automotores.
Además del mal aspecto que genera la basura, los denunciantes señalan que también se dejan residuos orgánicos derivados de animales de matanza, así como de frutas, verduras y legumbres echados a perder.
Lo anterior preocupa por posibles problemas de salud que se puedan generar en las personas que viven en los alrededores.
Por ello realizan nuevo llamado a las autoridades, bajo la consideración de que sólo sancionando a quienes dejan basura en la validad, es como podría resolverse la situación.
En el mismo orden de ideas, hicieron también llamado para que se realice una regulación integral de la zona, donde los espacios públicos son invadidos por los mismos comerciantes al colocar mercancía y objetos en las banquetas y el arroyo vehicular.
La situación acorta los espacios para la circulación peatonal, quienes además deben bajar precisamente al arroyo vehicular con el riesgo de ser atropellados por algún vehículo que circula en el también invadido bulevar Pifsal.
Por Daniel Martínez Martínez
