Cada 20 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Osteoporosis, enfermedad caracterizada por baja densidad y deterioro continuo de los huesos, lo que produce fragilidad y mayor riesgo de facturas.
El doctor Guillermo Espinosa Fuentes jefe del área de Enseñanza e Investigación de la Unidad de Medicina Familiar 222 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Delegación Estado de México Poniente indicó que es un padecimiento que puede afectar a mujeres y hombres de edad adulta, entre los 45 y los 65 años de edad; sin embargo, el sector femenino es el que la presenta con mayor frecuencia pues los embarazos, la llegada de la menopausia y el climaterio, generan pérdida de calcio, ocasionando en los huesos porosidad, adelgazamiento y fragilidad.
De cada diez consultas relacionadas con osteoporosis, siete u ocho corresponden a mujeres y sólo dos o tres a hombres, generalmente a pacientes que tuvieron un factor de riesgo como el consumo de esteroides u otros de índole genético, por lo que a partir de los 45 años es recomendable que hombres y mujeres se practiquen una prueba de densitometría para determinar si padecen osteoporosis.
Con la llegada de la edad adulta, el hueso va perdiendo capacidad para captar el calcio, debido a la baja producción del mismo, ya no llega directamente al hueso, no hay forma de regenerarlo y comienza un desgaste superior que en ocasiones con cualquier golpe o traumatismo se corre el riesgo de sufrir fracturas.
Agregó que las fracturas más comunes asociadas a este padecimiento son las de los huesos largos, como es el fémur, en especial la parte donde se une con la cadera, así como los cuerpos de las vértebras, donde se dan con frecuencia las denominadas facturas por compresión en las que sin motivo aparente la vertebra se colapsa porque está muy débil.
El especialista del IMSS resaltó que también existen fracturas patológicas, es decir, aquellas que “no se explican”, se presentan con un pequeño golpe, por cargar algo pesado o por torcerse un pie, sin embargo, la factura de cadera es la más frecuente y grave, ocasiona muchas molestias para el paciente y los familiares, además de que genera un gasto considerable para el sector salud, pues implica la implantación de prótesis con alto costo y lapsos de recuperación muy prolongados.
La osteoporosis debe prevenirse desde la infancia, con la ingesta de alimentos ricos en calcio, como leche y sus derivados, además de pescado o brócoli. La alimentación balanceada debe acompañarse de ejercicio simple, que requiera que el esqueleto soporte al cuerpo, por ejemplo caminata de entre 20 o 30 minutos diarios.
El doctor Espinosa Fuentes reiteró que la Delegación Estado de México Poniente cuenta con especialistas para diagnosticar y tratar este padecimiento asimismo recomendó asistir con su médico familiar periódicamente.
