A pesar de un impulso temporal en ventas por el regreso a clases, los zapateros de San Mateo Atenco enfrentan desafíos que amenazan su estabilidad económica y crecimiento. Uno de los principales problemas es la competencia de calzado importado, especialmente de China, que ingresa al mercado mexicano con precios significativamente más bajos. Según datos de la Cámara de la Industria del Calzado, aproximadamente el 70% del calzado que se consume en México es importado, y una gran parte proviene de China. Esto representa una desventaja para los productores locales, quienes deben lidiar con costos de fabricación más altos debido a los materiales de calidad y la mano de obra artesanal.
La situación ha obligado a los fabricantes de San Mateo Atenco a expandirse fuera de sus comunidades para encontrar nuevos clientes, buscando espacios en municipios vecinos y ciudades como Toluca para realizar expo-ventas y ferias temporales. Esta movilidad responde a la necesidad de reducir las pérdidas derivadas de una competencia que se ha intensificado en los últimos años.
Una de las productoras de calzado nos comentó que en San Mateo Atenco ya no llega gente a comprar el producto y las ferias o expo ventas son una alternativa para ofrecer el producto a otros clientes y refiere que el calzado chino ha afectado significativamente sus ventas.
“Nosotros como productores si vemos la baja en nuestros negocios, en nuestros talleres, es complicado tener que ir buscando espacios para poder ofrecer nuestros zapatos pero no nos damos por vencidos por que sabemos que ofrecemos calzado de muy buena calidad”
Esta vez la expo-venta de calzado de San Mateo Atenco se encuentra en la Alameda Central de Toluca con un horario de 10:00 AM a 8:00 PM y va a estar hasta el 3 de noviembre. Estos expositores hacen una invitación a las personas a que consuman producto local.
Además, es importante resaltar que el encarecimiento de insumos y la falta de subsidios representan otro obstáculo, pues al no poder competir en precios, muchos consumidores optan por alternativas importadas, afectando la tradición y sostenibilidad del sector artesanal mexicano.
Esta situación no solo amenaza la economía local, sino que también pone en riesgo el empleo y el conocimiento técnico de generaciones de zapateros.