Valle de Tulancingo, Hidalgo.- En los últimos diez años, tres casos de desfalco a cuentas de comités de padres de familia en escuelas públicas de la región terminaron con el encarcelamiento de los responsables del resguardo de los recursos económicos.
Así lo confirmó Rubén Hernández Ortega, Subdirector Regional de Educación, señalando que dicha década, son alrededor de 20 casos los que fueron denunciados formalmente, tras comprobarse el inadecuado uso de los recursos aportados por los padres de familia en planteles educativos públicos.
En todos los casos, se le notificó a los tesoreros implicados en el mal manejo de los recursos financieros dicha situación, con objetivo de dar oportunidad de realizar aclaraciones, o bien, devolver los recursos.
En los casos donde no hubo atención a la advertencia, se han presentado las denuncias respectivas, y en tres casos, de plano implicó prisión.
Hernández Ortega recordó que actualmente el mal manejo de los recursos económicos no es considerado como abuso de confianza, sino como robo, lo que agravaría la situación para el o los implicados.
Mientras que en el ciclo escolar 2016 – 2017 no se presentaron casos de abuso de confianza, hoy considerados como robos, en el recién concluido existe uno, al cual se le está dando en este momento seguimiento.
Durante el ciclo escolar 2015 – 2016, también se conoció de un caso sobre mal manejo de recursos económicos en mesas directivas de padres de familia en escuelas públicas.
El funcionario señaló que de hecho ya existe un cambio de conciencia, por lo que los casos de desfalcos han ido a la baja, pues anteriormente se conocían de tres a cuatro situaciones en cada ciclo escolar.
Consideró que uno de los factores que han permitido tener un mejor control de los recursos económicos, además de la responsabilidad de los integrantes de las mesas directivas, es la revisión de cuentas, que se realiza de forma trimestral.
Con ello, incluso se tiene mayor claridad respecto al uso de las cooperaciones, que deben aplicarse para el pago de obras, mantenimiento y servicios de los planteles de educación pública.
Por Daniel Martínez Martínez
