Una vez que la Fiscalía General del Estado con los datos de prueba integró durante la investigación, formuló imputación en contra de dos mujeres y tres hombres presuntamente implicados en introducir a un menor de edad sin vida al Centro Penitenciario de San Miguel.
Se restablecen las medidas y protocolos de seguridad al interior y exterior del Penal de San Miguel, afirmó el gobernador Luis Miguel Barbosa, tras sostener que siguen las investigaciones por el caso Tadeo, bebé que fue introducido para desestabilizar la cárcel, una vez que fueron vinculados a proceso las dos mujeres, entre ellas la que metió el cuerpo del menor, y cuatro custodios.
Una vez que la Fiscalía General del Estado con los datos de prueba integró durante la investigación, formuló imputación en contra de dos mujeres y tres hombres presuntamente implicados en introducir a un menor de edad sin vida al Centro Penitenciario de San Miguel.
En audiencias, la autoridad judicial determinó vincular a proceso a las cinco personas por delitos contra la ley general de salud e infracciones a las leyes y reglamentos sobre inhumaciones y exhumaciones, y asociación delictuosa.
La Institución a cargo de procurar justicia en el Estado de Puebla, sustentó que presuntamente en la planeación y operación del ingreso sin vida del cuerpo para que fuese posteriormente detectado, participaron: Nadia Carolina N. como visitante, Jessica N. y Gerardo N. en su función de custodios y los internos Antonio N. y Sergio N, cuyos hechos han sido atribuidos para crear desestabilización en el penal.
En este sentido, el gobernador Luis Miguel Barbosa, comentó que la vinculación de las cinco personas, quienes permanecen con la medida cautelar de prisión preventiva en Centros Penitenciarios de Tepexi de Rodríguez y de Puebla en la entidad poblana y en el Centro Federal de Chiapas, está firme.
Argumentó que las investigaciones seguirán por parte de la Fiscalía, ya que los responsables de haber introducido al bebé Tadeo ya están en la cárcel.
Aclaró que la detención de los implicados ha generado consecuencias colaterales de las que la autoridad ha tomado cartas en el asunto, como restablecer la tecnología que se había adquirido y se había distorsionado.
