- La verdad se descubrió gracias a que algunos de sus seguidores visitaron el lugar en el que supuestamente vivía la influencer
Liangshan Mengyang, influencer china originaria de un pueblo de la provincia central de Sichuan, fue sentenciada a once meses de prisión por utilizar publicidad engañosa para vender productos durante sus transmisiones en vivo.
Desde 2018, la chica comenzó a decir llorando a través de redes sociales que era muy pobre, contaba que quedó huérfana y tuvo que dejar la escuela para cuidar de sus hermanos, además aparecía vestida con ropa desgastada en una casa de adobe en mal estado, y aseguraba que solamente se alimentaba de papas.
Aunque en un inicio sus ventas y el número de seguidores en sus cuentas aumentaron, algunos fanáticos que visitaron su pueblo descubrieron que los padres de Liangshan están vivos y la familia vive en una casa estatal con condiciones económicas “decentes”.
Tras esto, la policía abrió una investigación y determinó los productos que vendía la influencer no eran locales, ya que ella trabajaba para una compañía de Chengdu que creaba personajes falsos para que ganaran fama en internet y vendieran sus productos.
Luego de la investigación, siete personas más fueron detenidas y las condenaron a penas de entre nueve meses y un año de prisión y les otorgaron multas de hasta 100 mil yuanes.