Pachuca de Soto, Hidalgo.- Durante el transcurso de la pandemia por COVID-19, el sistema penitenciario de Hidalgo ha confirmado hasta el momento 60 contagios y seis decesos de reclusos por coronavirus.
Ciudad de México ocupa el primer lugar por incidencia de esta enfermedad en cárceles con mil 341 contagios, seguido de Puebla con 292 casos; Chihuahua con 131 infectados, así como Jalisco con 122.
De los 13 centros penitenciarios del estado que supervisó el organismo protector de derechos humanos, identificó como población vulnerable ante el COVID-19 a 333 indígenas, 198 adultos mayores, 77 con padecimientos mentales, 491 con capacidades diferentes y 29 extranjeros.
En el informe especial sobre el estado que guardan las medidas adoptadas en Centros de Reinserción Social (Cereso) para la atención de la emergencia sanitaria, la CNDH señaló que en las cárceles del estado se debe fortalecer el filtro de sanidad para la toma de temperatura corporal de los visitantes.
Además, “no se cumple con la medida sanitaria de sana distancia, derivado del hacinamiento en algunos espacios”.
La CNDH apunta que el área femenil del Cereso de Pachuca cuenta con una zona denominada maternal, la cual alberga a 11 menores de tres años, de los cuales, por medidas sanitarias, siete fueron externados de forma temporal con sus familias.
También se habilitaron espacios de cómputo para llevar a cabo videollamadas entre personas privadas de la libertad y familiares.
Por Daniel Martínez Martínez