– Se busca evitar que familiares se contagien.
El secretario de Salud, Humberto Uribe Téllez afirmó que la entrega de cuerpos de personas que fallecieron por COVID-19 se realiza con medidas específicas para disminuir posibilidades de contagio.
En entrevista dijo que cuando una persona fallece por COVID-19 en alguno de los hospitales, se expide el acta de defunción a la familia, y se les pide que no tengan contacto con el cuerpo, para que sea sepultado o incinerado.
“Los cuerpos se han entregado en tiempo a los familiares con el manejo específico para disminuir posibilidades de contagio”.
Mientras tanto, el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta señaló que en Puebla no se incurrirá en actos discriminatorios, ya que no se contempla destinar un predio para hacer el entierro o depósito de cuerpos de personas que han muerto por Coronavirus.
El mandatario dijo que la única medida que le han solicitado a los directivos de los panteones es que deben cuidar que el entierro sea en asilamiento con bolsas especiales.
Aclaró que los deudos son libres de decidir cómo serán tratados los restos de sus parientes, es decir, si serán cremados o enterrados.
Especificó que las personas que hayan perdido la vida por Covid-19, no es sinónimo de que los cuerpos tengan que ser excluidos de un entierro normal.
Puntualizó que los familiares cuando se les entrega el cuerpo, se les hace saber las medidas y tiempos que deben cumplir para hacer el entierro en el panteón, entre ellas, el que no deben pasar más de doce horas para realizar el entierro o incineración, porque no se permite velar el cuerpo en casa.