- Mujeres se raparon públicamente, dieron sangre, acudieron a Palacio Nacional, encendieron velas, simularon las humillaciones que ocurren en los penales mexiquenses
María y Luisa y Yolanda, son madres que pasan por lo mismo, están en plantón donde cinco de sus compañeras mantienen una huelga de hambre para exigir que se aplique la ley de Amnistía a sus familiares. A 24 horas, su fuerza y su lucha no se han ido, pese a no ingerir alimento alguno.
María Luisa ya dio sangre, se sometió a la simulación de humillaciones que sufren reclusos en las cárceles, ha estado en seis manifestaciones hechas por familiares de unos 20 internos en cuyos casos la Comisión de Derechos Humanos estatal reconoce violaciones a los derechos.
Su hijo fue detenido hace cuatro años en el local de su cuñada sin orden de aprehensión y llevado al penal de Santiaguito en Almoloya de Juárez. Lo acusan del homicidio de un joven que tenía 15 días de haber llegado a vivir a Santiago Miltepec, en Toluca.
Acusó que la autoridad no tomo en cuenta las inconsistencias en los datos aportados por los testigos y las contradicciones contenidas en sus declaraciones. Además solo lo identifican por su perfil en facebook y una perforación en la ceja, que no tiene.
La autoridad además lo reconocía como persona que anteriormente estuvo preso en el Penal de Tenancingo, cuando él no contaba con antecedentes.
Su sentencia es de 47 años pero lejos ya de poner apelaciones lo que quieren es la amnistía porque insiste en que su hijo es inocente y no cometió el homicidio.
Yolanda está en representación de Jesús, su hijo que lleva siete años encarcelado y a quien ya sentenciaron a 43 años y medio de cárcel también por el delito de homicidio ocurrido en Zinacantepec.
Narró que el joven que este año cumplió 31 años se dedicaba a estudiar Derecho en una universidad privada, además de trabajar medio tiempo para mantener su carrera, a su hija y su esposa.
El día que ocurrió el asesinato hubo una riña entre jóvenes del pueblo donde viven y otro bando que no era del sitio, un taxista que conoce a todos los involucrados, fue testigo de los hechos y quien fue presentado a rendir declaración.
Yolanda contó que el propio chofer declaró que en ningún momento vio a Jesús en el lugar de los hechos, que no estuvo ni en los alrededores, pero ese dato no lo tomó en cuenta el juez y lo sentenció a 47 años.
Por apelación le quitaron solo cuatro años, pero buscan la amnistía porque el principal testigo ya dijo en el proceso oral que su hijo no estuvo en el sitio ni participó en los hechos.
Molesta aseguró que no se quitarán de la Plaza de los Mártires hasta que les hagan caso y retó al gobierno estatal a que si las quieren fuera, que las quiten.
Con anterioridad el grupo de familiares ya emprendieron otras seis acciones para exigir la amnistía de sus hijos, padres, tíos, abuelos o hermanos.
Mujeres se raparon públicamente, dieron sangre, acudieron a Palacio Nacional, encendieron velas, simularon las humillaciones que ocurren en los penales mexiquenses.
