Ixmiquilpan de Martínez, Hidalgo.- Trabajadores de confianza de la presidencia de Ixmiquilpan, quienes suman más de 130, se inconforman con el alcalde Pascual Charrez Pedraza, debido a que los obliga aportar recursos de sus salarios para cubrir sus compromisos en obra pública, pues de no hacerlo los amenaza con despedirlos.
Los inconformes, quienes pidieron omitir sus nombres por temor a represalias, informaron que ya son más de 12 los trabajadores despedidos por externar su inconformidad con “el diezmo” que tienen que proporcionar continuamente de su sueldo.
Informaron que recientemente en la construcción del puente vehicular de Bangandho-Capula, que servirá para atravesar un canal de aguas negras, el edil exigió tres bultos de cemento a cada funcionario, logrando juntar entre todos, un promedio de 13 toneladas de cemento.
Indicaron que los funcionarios de primer nivel, cuyos salarios superan los 20 mil pesos, no tienen tantos problemas con esas peticiones; sin embargo, hay subalternos cuyos ingresos son menores y afecta a su economía familiar. Nadie puede decir nada, de hacerlo son despedidos.
En este mismo sentido, revelaron que las fiestas que realiza el alcalde por el inicio de sus obras son costeadas por los mismos trabajadores de confianza, quienes tienen que aportar entre 50 a 200 pesos, como sucedió en el barrio El Carmen, con la pavimentación del libramiento Cardonal- Ixmiquilpan.
Dijeron desconocer si las aportaciones son generales o solamente es para los que están trabajando en la alcaldía, pues indicaron que además de sus dos hermanos y esposa, son los que tienen puestos de primer nivel; otros familiares que cobran sin trabajar, motivo por el cual, consideran sería importante que les hicieran una auditoría.
Por último, hicieron un llamado para que el alcalde no comprometa el trabajo y el sustento de terceros, pues aun cuando están en la disposición de contribuir, son contantes “los diezmos” que tienen que dar.
Por Daniel Martínez Martínez