La familia Guadarrama tiene más de 50 años elaborando dulce de leche artesanal en Toluca, mezcla del lácteo y azúcar que da tradición a la capital.
En la alacena número dos de la Plaza Fray Andrés de Castro, el señor Raúl Guadarrama vendió este tradicional dulce por medio siglo, ahora lo hace su hijo Óscar Guadarrama Serrano, quien ofrece jamoncillos de 10 diferentes sabores, cocadas, limones, obleas y más. El jamoncillo y los chongos son los productos que más consumen los visitantes y locales.
La familia cuenta con un taller equipado para producir dulce suficiente, y pese a que la elaboración del jamoncillo es tardada, siempre cumplen con sus compromisos de venta. En un día preparan mil piezas para toda la semana, aunque lo que se elabora diariamente son los chongos zamoranos.
Óscar resaltó que tuvo la oportunidad de unirse al grupo de emprendedores que acompaña al equipo de la réplica de la Capilla Sixtina, expuesta en diversas entidades, por lo que sus productos se han conocido en Tapachula y Tuxtla Gutiérrez, Chiapas; Torreón, Coahuila; Mérida, Yucatán; Reynosa, Tamaulipas, y el próximo año representará a Toluca y al Estado de México en Panamá.
“Me llena de emoción llegar a cualquier estado, representar a Toluca es una tremenda satisfacción, porque mucha gente no puede venir y llevar nuestros productos la verdad es satisfactorio”, expresó.
Es un oficio al que le dedican todo su tiempo, en un negocio que atienden 12 horas al día los siete días de la semana, y ahora la familia deposita su fe en que dos de sus integrantes continúen elaborando el dulce de leche de manera artesanal, al ser una actividad que les ha permitido salir adelante.
