Con base al reciente desplome ocurrido el pasado 17 de noviembre, en el que el helicóptero Águila 1 sufrió un accidente aéreo en Jesús María, Aguascalientes , la Delegación de la Fiscalía General de la República, realizó una investigación en colaboración con la Fiscalía de Justicia de Aguascalientes, descartando índices de impactos producidos por arma de fuego en los restos de la aeronave.
En el comunicado se investigaron los posibles delitos 170 y 399 del Código Penal Federal, que hacen referencia a persecución de terceros que hubiesen incurrido en la ejecución de un delito y a aquellos que hayan empleado explosivos o materias incendiarias, que por cualquier medio destruya total o parcialmente instalaciones o servicios de navegación aérea o marítima o de aeropuertos que presten servicios a la aviación civil.
Para la investigación se realizaron peritajes en materia de aeronáutica, criminalística de campo, incendios, seguridad, genética y balística, así como la compilación de videos del C-5 y C-4 correspondientes al área del accidente, para lograr el descarte de algún atentado en contra del vehículo aéreo.
Así, la fiscalía dijo, continuará realizando investigación y al obtener información o pruebas que puedan ser difundidas por esta, se darán a conocer a la brevedad.