Valle de Tulancingo, Hidalgo.- Tras aproximadamente 40 años de no realizar acciones de limpieza alguna al vaso de la presa La Esperanza, y cinco años después de presentar solicitud para dichas acciones, inició el retiro de lirio, con maquinaria prestada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales en Hidalgo (Semarnath).
Ricardo Hernández Pérez, presidente de la Asociación de Usuarios del Módulo 1 Aguas Blancas del distrito de riego Tulancingo, dijo que el cuerpo de agua está prácticamente invadido por lirio, lo que ha provocado en algunos momentos sobrecalentamiento de la maquinaria para el corte del lirio.
El proceso de retiro implica que las máquinas realicen dos recorridos, uno de ellos para un primer corte del lirio, el cual al secarse, es de nuevo cortado para su trituración definitiva, y con ello proceder a su retiro definitivo del cuerpo de agua.
Se calcula que actualmente el 70 por ciento de la presa La Esperanza, de 54 hectáreas de extensión y una capacidad de almacenamiento de 4 millones de metros cúbicos de agua, está invadido por lirio, por lo que su retiro permitirá aumentar el volumen de almacenamiento, usada actualmente para riego, pero con un proyecto contemplado para surtido y consumo humano.
Carlos Muñiz Rodríguez, secretario estatal de Desarrollo Agropecuario en Hidalgo (Sedagroh), presente en visita de inspección a los trabajos realizada a inicios de la semana, señaló que la maquinaria prestada por la Semarnath es de tecnología mexicana.
Incluso actualmente es utilizada para el retiro de lirio y plantas de la presa Endhó, una de las más grandes del país.
El funcionario estatal reconoció que la situación de limpieza de la presa La Esperanza era tan complicada, que en algunas partes el lirio se había instalado de tal forma, que incluso parecía tierra firme.
Agregó que la limpieza de esta presa permitirá el uso adecuado y con un incremento importante en el volumen de agua almacenada, lo que permitirá dar servicio adecuado a los productores agrícolas, tanto del Valle de Tulancingo, como de la región del Altiplano hidalguense.
Hernández Pérez dio a conocer que los trabajos durarán aproximadamente dos meses, incluso con limpieza a mano en los sitios donde no alcance a llegar la maquinaria.
Por Daniel Martínez Martínez
