En el perímetro ferial, tanto en la calle Carranza como afuera del templo de San Marcos, cada año, los comerciantes de la zona ofrecen diversos productos y servicios, pero la temporada no siempre es buena ni para los que ya llevan años con su local como para aquellos que están sólo durante la verbena abrileña.
Algunos mencionan que temporadas pasadas les ha ido mejor en cuestión de ventas, y aunque no descartan que les ha ido un poco bajo, esperan que conforme vaya avanzando la feria, incrementen su ganancia.
La mayoría de estos negociantes son foráneos, y aseguran que si usted está cerca de su lugar, puede llegar a comprar lo que necesite, pues ellos están disponibles para atenderlo todo el día.