La leyenda de la máscara plateada se despedirá con una gira especial por México, cerrando más de cuatro décadas de historia en la lucha libre sin perder su icónico emblema.
El Hijo del Santo, uno de los íconos más reconocidos de la lucha libre mexicana, anunció oficialmente que se despedirá de los cuadriláteros tras más de cuatro décadas de carrera. Con la serenidad de quien ha construido una trayectoria ejemplar, el heredero de la mítica máscara plateada explicó que su decisión no se debe al cansancio ni a una pérdida de pasión, sino al deseo de concluir su historia “con dignidad” y con la máscara intacta, como símbolo de respeto hacia su padre y hacia la afición que lo ha acompañado desde sus inicios.
La gira de despedida llevará por nombre El Final y comprenderá tres funciones especiales en las que el luchador enfrentará a rivales de gran nivel, rodeado de figuras emblemáticas del pancracio nacional. Los eventos se realizarán en Monterrey, Guadalajara y Ciudad de México, culminando con una gran función en el Palacio de los Deportes, donde se espera una asistencia multitudinaria. Cada fecha contará con carteleras variadas que incluirán combates estelares, luchas femeniles y presentaciones de minis y micros, buscando ofrecer un espectáculo digno de su legado.
Durante el anuncio, el Hijo del Santo expresó que este retiro no implica alejarse completamente de la vida pública. Planea seguir vinculado a la lucha libre desde otros ámbitos, además de explorar proyectos en el cine y en medios digitales. Sin embargo, su etapa como gladiador activo llegará a su fin, cerrando así un capítulo histórico para la lucha libre mexicana.
Con este adiós, el enmascarado reafirma su lugar como uno de los últimos grandes referentes de la tradición luchística. Su determinación de retirarse sin perder la máscara añade un peso simbólico a su despedida, al preservar la herencia familiar y la mística del héroe anónimo que ha inspirado a generaciones. Su salida de los cuadriláteros marcará no solo el fin de una era, sino también el inicio de un nuevo legado para quienes crecieron admirando al hombre detrás de la máscara plateada.