Tulancingo de Bravo, Hidalgo.- Algunos automovilistas que fueron sancionados por no acatar las medidas del programa estatal temporal Hoy no circula, señalaron que les fueron cobradas cantidades por encima de las autorizadas por parte de servicios de grúas, al momento de ser remolcadas sus unidades a corrales para cumplir la sanción.
Solicitando no dar a conocer sus identidades para no tener represalias, los denunciantes señalaron que tras ser infraccionados el pasado fin de semana por circular con sus automóviles en días que no lo podían hacer, les fueron cobrados montos cercanos al doble de lo establecido oficialmente.
Además los automovilistas sancionados acusaron que algunos gruyeros inventaron distancias mayores a las reales entre el punto donde fueron sancionados por las autoridades y el corralón hasta donde fueron arrastrados y depositados sus vehículos automotores.
“A mí me multaron (por circular en día no autorizado) en el crucero del Magisterio, y el corralón a donde se llevaron mí coche está a tres kilómetros, cuando mucho. Y me cobraron como si hubieran sido diez kilómetros de arrastre”, señaló uno de los automovilistas, sancionado en el punto de revisión policiaca implementado sobre el corredor vial San José.
De acuerdo con el tarifario de arrastre, una grúa de A de 3.5 toneladas debe cobrar 18.82 pesos por kilómetro, y 528.69 pesos por banderazo, mientras que una tipo B de 6 toneladas tiene tarifa establecida de 20.62 pesos por kilómetro y 607.43 pesos por banderazo.
La tarifa máxima es de 885.84 pesos por banderazo en una grúa de 25 toneladas.
Sin embargo, los quejosos señalaron que los pagos en algunos casos fue del doble de lo estipulado en la tarifa oficial, y tras diálogo con los encargados de las grúas, aceptaron bajar el costo del arrastre, que de todas maneras fue por arriba de las tarifas autorizadas.
Aseguraron que presentarán denuncias al respecto ante las autoridades respectivas, pero quisieron dar a conocer la situación para evitar que otros automovilistas fueran sujetos a lo que consideraron como injustos aumentos a los montos originalmente establecidos oficialmente.
Por Daniel Martínez Martínez
