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Entre otras cosas, se debe determinar por qué el costo de la obra pasó de poco más de mil millones a dos mil 200 millones de pesos
Comunicado.
La auditoría que se realiza al llamado Paso Express de Cuernavaca debe deslindar responsabilidades lo antes posible, porque es evidente que hubo negligencia y probable desvío de recursos públicos, afirmó el Coordinador de los diputados del PAN, Marko Cortés Mendoza.
Destacó que el Congreso está obligado a llevar a cabo sus funciones de fiscalización, que no se contrapone con el trabajo que está realizando el Grupo de Expertos encargado de investigar las causas de la tragedia que provocó la muerte de dos personas, además de cuantiosas pérdidas económicas y malestar entre millones de personas que utilizan esa vía de comunicación.
Por ello, dijo, que se ha pedido a los diputados panistas en las comisiones de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación, de Comunicaciones y de Transportes, impulsar desde el Congreso una eficaz rendición de cuentas.
“Se trata de coadyuvar a encontrar a los responsables de los “vicios ocultos” del Paso Express, una obra que como toda esta administración federal huele a corrupción y descuido permanente”, subrayó.
El líder de la bancada del PAN pidió al Grupo de Expertos, integrado por ingenieros de la Universidad Nacional Autónoma de México y de los Colegios de Ingenieros de México y Morelos, que se haga un trabajo con objetividad y tomen en cuenta todos los criterios, no sólo los de carácter técnico, sino que incluyan las voces de los ciudadanos que advirtieron de las fallas en la construcción y malos acabados.
Por ejemplo, se sabe que desde el 19 de junio las autoridades locales entregaron 48 observaciones a la oficina del Secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruíz Esparza, inclusive con sello de recibido, pero no recibieron respuesta y por lo tanto no les hicieron caso.
Dijo que han quedado marcadas para la historia las declaraciones de los funcionarios del gobierno que en la inauguración dijeron que estaban poniendo en marcha una obra para 40 años, pero hoy sabemos que se vino abajo –criminalmente– en apenas 3 meses.
En este sentido, se debe investigar por qué la asignación del contrato de la obra del Paso Express inicialmente fue de mil 45 millones de pesos pero terminó elevándose a más del doble, es decir, a dos mil 200 millones de pesos.
En Acción Nacional confiamos en que el resultado del dictamen reflejará las deficiencias que se han conocido y por eso es importante que el Congreso de la Unión participe en las investigaciones e identifique a los posibles responsables.
“El enorme hoyo del Paso Express en Morelos no es un “gaje del oficio”, como dijo el Secretario Ruiz Esparza, sino que es un socavón que refleja lo que hemos tenido en estos casi cinco años de la administración del PRI, un ejemplo más del vacío y de la corrupción que hemos vivido en los últimos años”, finalizó.
