Farmacias, Centro de AA, Abarrotes y puestos de comida se encontraban al interior del penal Francisco J. Múgica
“Ellos ya decían que tenían información, que se les había hecho llegar del exterior”, aseveró Félix López Rosales, quien fungiera como director hasta hace unos días del Cereso “Francisco J. Múgica”, tras dar a conocer que una noche antes del traslado, los internos se encontraban listos para su salida, después de asentir que se tenía información extra oficial donde se conocía que los reclusos mantenían interacciones a través de las redes sociales.
Puntualizó que al asumir el cargo en junio de 2016, la población del reclusorio era de 414 personas, sin embargo el pasado domingo se trasladaron 334 internos al penal “David Franco Rodríguez” ya que algunos cumplieron satisfactoriamente su condena, o bien el juez les proporcionó libertad por garantía.
Ante las declaraciones del presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), Víctor Manuel Serrato Lozano, donde aseguraba que al interior del Cereso se mantenía una situación de ingobernabilidad, López Rosales dijo desconocer bajo qué termino se catalogaba de esta manera, sin embargo reconoció algunas anomalías.
“Cuando llegué a la administración de este penal el año pasado, sorprendí que estaban intentando meter refrigeradores al lugar, y yo hablé con la empresa para decir que se tiene que pedir la anuencia que se requiere, no pueden estar pidiendo ese tipo de cosas”, reconoció.
Negando que hubiera preferencias con los reclusos, el ex director del centro penitenciario afirmó que los ex autodefensas que se encontraban cumpliendo su sentencia fueron separados en las galeras 22 y 28 respectivamente, para salvaguardar su integridad personal.
“Todos estuvieron bien atendidos, que hubiera privilegios a mí no me toco participar en ningún asunto para mi todos fueron tratados de la misma manera, aquí la dirección a mi cargo siempre estuvo al pendiente”.
Información: Karla Martínez
