Cuando falta el testamento, el proceso es más largo y engorroso.
En lo que va del año, en el Tribunal Superior de Justicia del Estado de México se han iniciado casi mil 500 asuntos por Juicio Sucesorio Testamentario; en tanto, más de siete mil han sido Juicios Sucesorio Intestamentarios, es decir, que no cuentan con un documento legal que especifique la distribución de bienes a los herederos.
Durante 2016, los juicios sucesorios testamentarios fueron casi mil 700 y los sucesorios intestamentarios más de nueve mil 200, es decir, cinco veces más; al respecto, el juez tercero familiar de Toluca, con residencia en Metepec, Héctor Macedo García destacó la importancia de que los involucrados en un juicio sucesorio se concienticen acerca de la naturaleza del testamento y comprendan que los padres no están obligados a heredarles los bienes que construyeron durante toda su vida.
Macedo García explicó que el Notario es el único facultado para hacer un testamento y el Poder Judicial lo ejecuta en un procedimiento fácil por regla general, pues se señala una fecha para la audiencia, se convoca a los herederos, a la albacea, se lee el testamento y se declara la validez, si nadie se opone, ya se pueden llevar a cabo las cesiones.
En un juicio sucesorio intestamentario, el juez determina primero quiénes tienen derecho a heredar, lo que se denomina sucesión legítima, porque la ley establece quiénes son herederos. Si está casada (o), la esposa (o) y si hay descendencia, la esposa (o) conjuntamente con los hijos; se respeta el 50 por ciento de los derechos de la esposa (o) en caso de estar casado por sociedad conyugal y si no hay, entonces los descendientes, de no existir, los colaterales que son los hermanos y así sucesivamente hasta el cuarto grado.
Se busca en el archivo general de notarías para constatar que no hay testamento, se señala un auto declarativo de herederos, después se señala junta para designar albacea y se realizan acuerdos.
Macedo García aclaró que un juicio de sucesión testamentaria, donde existe conformidad de las partes, se resuelve en 2 o 3 meses, pues solo se requieren los informes del Archivo General de Notarias que validen la no existencia de otro testamento; pero si uno de los herederos se opone a la repartición de los bienes, el procedimiento puede alargarse más de 10 años.
Agregó que a nivel juzgado ya se aplica la mediación y la conciliación, ambas herramientas son indispensables para evitar conflictos y concluir los asuntos más rápido, mediante reuniones con los herederos donde se les concientiza e invita a llegar a un convenio según lo estable la ley para repartir los bienes sin dar a nadie más ni menos.
El juez del PJEdomex acotó que al hablar de testamentos no debe perderse de vista que son bienes que no se trabajaron por los herederos sino por los padres, y estos pueden o no heredarles ejerciendo su derecho exclusivo y personal.
