Tulancingo de Bravo, Hidalgo.- Un grupo de vecinos de la comunidad de La Lagunilla se manifestaron la mañana de este lunes 20 de septiembre frente a un terreno donde actualmente se construye un centro de distribución regional para una cadena de tiendas de abarrotes.
La manifestación fue para exigir a empleados de la empresa a cargo de la construcción de dicha infraestructura que les fueran mostrados planos, plan de trabajo, así como estudios de impacto ambiental y demás documentación que solvente dicho proyecto.
La situación detonó por el reclamo para que se respete el derecho de vía en la zona, señalando los vecinos que existan por lo menos un metro y medio de distancia respecto a la carretera de acceso a la comunidad, señalando que en fechas recientes ya se han registrado dos accidentes.
Al sitio acudieron autoridades de los municipios de Tulancingo y Singuilucan, quienes escucharon tanto a los vecinos respecto a sus exigencias, como a los representantes de la empresa constructora, mostrando disposición para la entrega de documentos, así como para responder a las exigencias de los vecinos.
Se generó una improvisada reunión donde se mostró el plan general de construcción del centro de distribución, señalando que en los siguientes días mostrarán el estudio de impacto ambiental, así como el resto de los documentos que permiten la obra.
Tras ello, se estableció compromiso de respetar el derecho de vía acompañado de una bahía para ascenso y descenso de pasaje, además que la vía de acceso terrestre tanto a La Lagunilla como a comunidades cercanas, será atendida, tras algunos baches que ha generado por el reciente movimiento constante de vehículos de carga pesada, precisamente para la construcción del centro de distribución regional.
Será en una nueva reunión a realizarse en próximos días cuando también serán presentados otros temas relacionados a dicha construcción, como la existencia de una planta tratadora de aguas residuales, así como la garantía de preservar el medio ambiente, respetando flora y fauna existente en la zona.
Por Daniel Martínez Martínez