Esto representa un riesgo para la salud de los consumidores que lo compran sin etiqueta.
En Michoacán, más del 70 por ciento del mezcal no está regulado, es decir, no está certificado por la Secretaría de Hacienda, ni dentro del Consejo Regulador del Mezcal, aseguró José Manuel Hernández, secretario general de la unión de mezcaleros de Michoacán.
La limitante, los altos impuestos hacia este producto por parte de Hacienda, el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), el IVA, y el ISR federal y el estatal.
“El impuesto hacia el mezcal por hacienda es alto, tres impuestos IRS, IEPS, IVA y el gobierno anterior dejó un impuesto del dos por ciento sobre la actividad natural” lamentó el líder mezcalero, quien dijo que a pesar de que se produce mezcal, no se quiere regular por evadir el impuesto.
Es por ello que calculó que al año, el mezcal michoacano “legal” produce 1.8 millones de litros. Así mismo, comparó la producción de los pequeños productores con las grandes empresas. “Si un mezcalero produce 100 litros al mes, tiene el mismo impuesto que las grandes marcas, sí hay desinformación por parte de los órganos que materializan la ley”, expresó.
En este tenor, expuso que incluso, en conjunto con demás mezcaleros, se han dado cita en el Senado en solicitud de que la ley se reforme, sin embargo, a pesar de que los representantes de Michoacán sí los han recibido y escuchado, “Cuando se toca le punto federal se echan para atrás”.
Otra de las consecuencias de este tema es la venta clandestina de un líquido barato que se hace pasar por mezcal, el que José Manuel Hernández supone que se trata de vinaza, que no es más que el residuo del mezcal, metales como metanol, lo que es dañino para la salud.
Y aunque se ha trabajado con la Secretaría del Medio Ambiente, la Coepris, la Secretaría de Salud del Estado, poco se ha avanzado.
