El presidente de la Agrupación de Taxistas Unidos del Estado de México hizo hincapié que por el momento sólo las unidades cuyas concesiones están vencidas tendrán que acceder a la instalación del sistema de seguridad.
La instalación de cámaras de seguridad, GPS y botón de pánico, por el momento, solo es obligatoria para las concesiones que están vencidas, que equivalen al 25 por ciento de las unidades de taxi en el Valle de Toluca; así lo señaló Osvaldo Martínez González, presidente de la Agrupación de Taxistas Unidos del Estado de México (ATUEM).
Después de un acercamiento con las autoridades, es probable que se instalen equipos de aproximadamente 5 mil pesos.
“El problema de la renovación está dada debido a que el gobierno saca de la Gaceta medio año antes y solo dejan 15 días para la realización del trámite, además de que no hay capacidad de respuesta de las autoridades”, agregó Martínez González.
No ha habido una respuesta de parte de la Comisión de Transporte aun cuando solo algunos diputados han emitido una propuesta de prórroga de tres meses.
El presidente de la ATUEM señaló se encuentran en disposición de actualizar al sector y a su vez brindarles un mejor servicio a los pasajeros, no obstante, considera que es importante que las autoridades realicen debidamente su trabajo.
La mayor dificultad que se presenta, sostuvo, es la falta de dinero por la competencia desleal en el Valle de Toluca, además de que no existe una garantía de que los niveles de delincuencia disminuyan, pues la capacidad de respuesta de las autoridades es casi nula y en cualquier momento se puede desactivar.
“La vigilancia se ejecutará en el Centro de Control y Monitoreo de la Secretaría de Movilidad en Tlalnepantla, el cual dará monitoreo a más de 350 mil taxis que circulan en todo el estado. Reportarán un accidente, un acto ilícito o percance con los usuarios, pero será casuístico porque es necesaria una gran capacidad de memoria”.
Solamente 11 empresas del Valle de México tienen la autorización para vender tres dispositivos que tienen un costo de aproximadamente de 5 mil 500 pesos y 6 mil pesos. Además, son necesarias recargas de por lo menos 500 pesos para mantener la conexión a Internet de las cámaras, del GPS y el botón de pánico, para que éstos se mantengan en funcionamiento.
“Todo dependerá del tiempo que estén encendidas las cámaras, ya sea todo el día, o depende de la capacidad de memoria de los equipos, existen muchas lagunas técnicas, por lo tanto, si alguien está en disposición de cometer un acto ilícito basta con apagar los equipos”.
González añadió de que existe la posibilidad de realizar estas acciones sin utilizar tanto recurso económico, solamente es necesaria una aplicación telefónica, un servidor de 30 mil o 40 mil pesos que cubran mil unidades y les den la posibilidad de mostrar en tiempo real el origen-destino del servicio.
Con información de Milenio.
