Vecinos de los alrededores de El Vivero, considerado el único pulmón de Santa Cruz Guadalupe, en Cuautlancingo, se manifestaron de manera pacífica con pancartas y pintando manitas de niños con mensajes del cuidado del medio ambiente, tras oponerse al derribo de 400 árboles de eucalipto en el predio de 4.5 hectáreas, propiedad de Pedro Macsice Jaboco.
Violeta Rojas García
Este mismo día la Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial, colocó sobre la malla de los alrededores del predio, sellos de clausura, en cuyo interior se encontraban laborando 4 empleados, quienes permanecen en el interior.
Verónica Lara Cuautle, representante legal del propietario del inmueble, señaló que cuenta con los permisos del área de ecología del municipio de Cuautlancingo, que autorizó el derribo de los árboles que se encuentran enfermos, y que han sido avalados por estudios de la BUAP.
En defensa de su representado, afirmó que la oposición de los vecinos es porque no quieren que se sepa que se apoderaron de áreas federales donde construyeron albercas y piletas, mismas que colindan con la zona boscosa que es propiedad privada, y que pertenece desde hace 30 años a su cliente.
Rodrigo Fernández, defensor de la zona boscosa, dijo que la defensa surgió porque es la única zona boscosa con la que cuentan, y no van a permitir que se siga afectando.