Más allá de que no se está tomando en cuenta la cuestión de los aranceles a los jitomates dentro del Tratado Comercial con Estados Unidos y Canadá, conocido como T-MEC, se continuará trabajando con amparos en vistas de beneficio de los productores mexicanos. Así lo informó Jesús Seade Kuri, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Consecuencias negativas son las que vendrían a causa de la medida impuesta por Estados Unidos de ponerle un 17.5 al jitomate. Significaría pérdidas de alrededor de 350 millones de pesos al año, de los que aproximadamente 24 serían correspondientes a las afectaciones para con los productores michoacanos de tomate rojo, los cuales acabarían reduciendo sus exportaciones en un volumen de por lo menos 20%.
Sucede que el estado de Michoacán se encontraba posicionado entre las cinco entidades con mayor índice de producción de jitomate. Para muestra de ello, durante el año pasado, Michoacán acabó en el tercer lugar nacional de producción de esta herbácea, con un total de 222 mil 767 toneladas, solo por detrás de Sinaloa y San Luis Potosí, con 813 mil 095 y 380 mil 627 toneladas, respectivamente.