Atención a nuestros adolescentes
Por: Ricardo Joya
Conforme avance el proceso electoral 2018, la información política aumentará sustancialmente. El encuadre de los medios de comunicación se ha colocado, con mayor intensidad, en los temas de los partidos políticos y sus aspirantes o precandidatos.
Mientras eso ocurre, los adolescentes mexicanos, de 12 a 17 años de edad, deben vivir entre dos amenazas: el consumo de drogas y las desapariciones.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (Encodat) 2016–2017, los niños y jóvenes casi duplicaron el consumo de drogas ilegales. Se estima que 0.6 por ciento de la población adolescente en México es adicta a mariguana, cocaína, inhalables y, en menor escala, los tranquilizantes. Las mujeres de entre 12 y 17 años de edad incrementaron el consumo en 175 por ciento, y los hombres lo aumentaron en 69 por ciento.
El estudio, realizado por el Consejo Nacional contra las Adicciones (Conadic) y los institutos nacionales de Psiquiatría y de Salud Pública, advierte que un factor que influye en el consumo de drogas, es la percepción.
La mayoría de los adolescentes no percibe riesgo en su consumo, sólo 45.3 por ciento de ellos consideró que es “muy peligroso”. Los especialistas indican que la difusión en torno a los debates para legalizar el consumo de mariguana con fines médicos y lúdicos, ha contribuido al incremento del consumo, además de su alta disponibilidad –incluso en los centros escolares-, y su bajo costo.
Otro riesgo que enfrenta ese sector, se identifica por el hecho de que la cuarta parte de las personas desaparecidas entre 2013 y julio de 2017, son adolescentes menores de 17 años. Su probable destino: explotación criminal o trata de personas, según dio a conocer un trabajo de investigación del periódico “El Universal”.
La Red Nacional de Personas Extraviadas o Desaparecidas indica que diariamente 14 personas se suman a la lista. En lo que ha transcurrido de este sexenio, los adolescentes de 14 a 17 años se han convertido en el sector más vulnerable, al sumar 2 mil 944 casos.
Los hombres, de acuerdo con los especialistas, son utilizados como “halcones”, es decir: informantes del crimen organizado o para procesar sustancias en laboratorios; en el caso de las mujeres, uno de los destinos más comunes es la explotación sexual.
Ante ese panorama, poco se observa en el sector público –y en los propios medios informativos- con respecto a contenidos y campañas de comunicación para prevenir a los adolescentes sobre esas condiciones de riesgo… pero eso sí, tendremos casi 60 millones de spots para las campañas electorales de 2018.
En ese contexto, el rector de la Universidad Autónoma del Estado de México, Alfredo Barrera Baca, presentó el Programa Integral de Seguridad y Protección Universitaria, que considera la aplicación móvil S.O.S. UAEM. Al ser una aplicación geo-referenciada, se activará un operativo de protección ante situaciones de violencia y riesgo inminente de salud e integridad, y permitirá denunciar cualquier hecho delictivo que atente contra la seguridad individual y de la comunidad.
Así que el reto que tenemos por delante, con respecto a nuestros adolescentes, es enorme y muy delicado y requiere, invariablemente, de “la tribu entera”.
