Organismos campesinos entregaron a legisladores de Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), proyecto para el sector que contempla aumentar las asignaciones al sector del 1 al 5 por ciento del presupuesto estatal.
Arturo Cravioto
Entre los signantes está la Coordinadora Nacional Plan de Ayala cuyos representantes argumentaron que el campo ha estado abandonado por varios sexenios por lo que presentó proyecto presupuestal conjunto con para el rescate del sector agrario de Puebla y el resto de país.
Condenaron que de 69 mil millones de pesos que tuvo la entidad en 2018, solo se destinaron 680 millones de pesos, equivalentes a solo el 1.8 por ciento del gasto, en el cual se privilegiaron obras suntuosas que no generaron beneficio a todos los sectores.
Por ello exigen al gobierno saliente un incremento del 1 al 5 por ciento de los recursos destinados al sector para 2019, equivalentes a 3.5 mil millones de pesos para lograr la autosuficiencia alimentaria en granos básicos y leche y sustituir las importaciones por lo que buscan que Puebla sea puntero.
Pidieron también que el gobernador cite al Consejo Estatal de Desarrollo Rural, antes de enviar la propuesta del paquete económico ya que en los últimos 10 años, el Ejecutivo se ha ausentado a las sesiones del organismo.
Anunciaron que también al Congreso local que convoque a foros de consulta y diálogo a los campesinos, antes de la aprobación de las leyes de Ingresos y Egresos.
Que el presupuesto estatal atienda los ejes prioritarios del sector agrario y las zonas productoras, actualmente en estado de marginación.
En respuesta el senador Alejandro Armenta, hizo el compromiso de darle seguimiento a las exigencias del sector, al argumentar que lo anterior “no es un problema de recursos, sino de voluntad política”.
Por su parte la diputada federal Nelly Maceda, advirtió que de no ser atendidas las demandas por el gobierno estatal, de manifestarán llevando chivos y animales de trabajo y los mototractores inservibles a Casa Aguayo.
Además, los organismos campesinos propusieron crear una red de bodegas de maíz y frijol y la instauración de una cuenca lechera, para la fusión de Liconsa y Diconsa.
También propusieron la integración de cooperativas y empresas rurales familiares para la producción láctea.
Además la creación de un programa de cooperativas rurales para la producción y comercialización, junto con un programa de recuperación de suelos y uso racional del agua además del rescate de la cafeticultura, en ebeneficio de los productores más pobres.