Tulancingo de Bravo, Hidalgo.- La calidad del aire en la región Tulancingo no es preocupante en este momento, pues las emisiones de contaminantes son menores respecto a otras zonas de la entidad, en particular el Valle de Tula, donde en varias ocasiones se ha sobrepasado el límite para garantizar la salud de la población.
Lo anterior fue señalado por Said Javier Estrella García, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Estado de Hidalgo (Semarnath), puntualizando que en la entidad funcionan doce estaciones de monitoreo de la calidad del aire, que no muestra situaciones preocupantes, con excepción de la región Tula.
Sin embargo, recordó que las cuencas atmosféricas están interconectadas, lo que es factor para afectaciones en la calidad del aire por momentos, sobre todo por la cercanía que tiene el estado de Hidalgo, en particular los municipios de la zona sur de la entidad, con la Ciudad de México y su Zona Metropolitana.
Reiteró que en este momento la preocupación por la calidad del aire está en el Valle de Tula, aunque también en Pachuca, pues precisamente debido a su cercanía e interconectividad con la capital del país, existe alta posibilidad de tener importantes índices de contaminación del aire.
El funcionario también reiteró que la región Tulancingo no tiene problemas en este momento respecto a la calidad del aire, pero enfatizando que es este momento ideal para llevar a cabo acciones preventivas a situaciones de contaminación del aire.
Estrella García consideró que los programas de descuentos a multas en el tema de verificación a vehículos automotores, así como otros estímulos fiscales pueden provocar que la población acuda para tener unidades que generen menor generación de gases contaminantes en el aire.
Finalmente, dijo que se mantendrá vigilancia especial en el índice de calidad del aire en los doce centros de monitoreo ubicados en distintos puntos de la entidad, para prevenir que disminuya la calidad del aire, y en su caso, realizar acciones para resolver la situación ambiental.
Por Daniel Martínez Martínez
