Arturo Villalobos Ordoñez, doctor que atiende a los integrantes de la sección 22 de CNTE presentes en San Lázaro, ha dado consulta a más de 300 maestros que han enfrentado problemas respiratorios y gastrointestinales en los dos plantones que han instalado afuera de la Cámara de Diputados.
El galeno resaltó en entrevista que la lucha de los maestros es justa, pero también su actividad requiere de una buena salud, y reconoció que estas jornadas de lucha pasa factura en la salud de los docentes.
Dijo que las enfermadas por las que más acuden a consulta los docentes son infecciones respiratorias, gastrointestinales, complicaciones por diabetes e hipertensión arterial, además de algunos casos traumatismo o problemas de contracturas por la incómoda situación en que pasan la noche.
Señaló que la insalubridad en la que preparan su alimentos es otro de los problemas que enfrentan, y que hay maestros con un padecimiento previo que llevan un control en el ISSSTE, el cual suspenden por estas jornadas. “Meramente es la resistencia de profesor con su conciencia de lucha para mantenerse”.
Villalobos Ordoñez aseguró que en esta semana se han atendido aproximadamente 100 casos, y si algún maestro requiere atención especial es trasladado a alguna clínica como ocurrió la semana pasada.
Afirmó que la conciencia de los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) rebasa la cuestión de la salud, pues hay maestras con sus niños recién nacidos, embarazadas y en período de lactancia.
El médico sostuvo que el medicamento con el que cuenta es de campañas de recolección que hacen, desde fármacos simples, hasta de tercer nivel.
