¿A dónde lo aviento? Gritaba el operador a su copiloto ante el inminente riesgo.
Una rampa de frenado significó la vida para el operador de un camión que descendía ya sin frenos, por la carretera México – Tuxpan, a la altura de la estación terrena de Tulancingo; logrando que la pesada unidad detuviera su marcha antes de llegar a la zona de San José, donde se han suscitado un sin número de accidentes mortales debido a la misma situación.
De acuerdo a la versión de los asustados tripulantes, quienes la mañana de este martes salieron de Tula Hidalgo con destino a la comunidad de El Aserradero, en Cuautepec; las balatas del sufrieron sobrecalentamiento cuando pasaron por el entronque Pitula, antes de pasar frente al Hospital General de Tulancingo.
Posteriormente, el operador quiso frenar apoyándose con el motor, pero se neutralizó la transmisión, dejando la unidad prácticamente en punto muerto.
El joven operador quedó atónito al percatarse de la situación y tomó el acotamiento para evitar impactar a los vehículos que iba en el carril de baja velocidad; comenzó a gritar a su compañero: ¿a dónde lo aviento? Refiriéndose al camión y la zona boscosa en las inmediaciones de la estación satelital de Tulancingo.
Sin embargo, el copiloto, al notar que el conductor de plano pensaba introducirse en la zona boscosa, le sugirió que siguiera derecho, recordando que había una rampa de frenado más adelanta.
Y efectivamente, a metros de la entrada a la estación terrena, el camión tipo chato, con placas de circulación HH 70 206 del Servicio Público Federal, color blanco con caja naranja, pasó de largo directo a la rampa de frenado; donde detuvo su marcha tras ladearse un poco, pero finalmente no se volteó, a pesar de las 12 toneladas de alimento que llevaba consigo.
Visiblemente nerviosos y asustados, los tripulantes bajaron de la unidad y se reportaron enseguida con sus patrones, para solicitar apoyo.
“Lo que más me preocupaba era acostarlo para no seguir de largo, ya que entrando a la zona urbana, hubiera sido una tragedia”, aseguró el conductor.
Esta rampa de frenado es prácticamente la última, antes de entrar a la zona de San José; conocida hace un par de años como la bajada de la muerte, precisamente por los hechos trágicos que se han suscitado debido a camiones pesados que se quedan sin frenos.
