“He decidido presentar mi renuncia al patronato legalmente reconocido por el Poder Judicial, para que no haya más pretextos y se regrese de inmediato a la normalidad que tanto hemos anhelado, lo más importante es que nadie puede poner excusas para regresar a clases presenciales”.
El Rector de la UDLAP, nombrado por el nuevo patronato de la institución, Armando Ríos Piter, renunció, bajo el argumento de que ya no existirán pretextos para que alumnos y catedráticos, regresen al campus.
“He decidido presentar mi renuncia al patronato legalmente reconocido por el Poder Judicial, para que no haya más pretextos y se regrese de inmediato a la normalidad que tanto hemos anhelado, lo más importante es que nadie puede poner excusas para regresar a clases presenciales”.
Recordó que gracias a la resolución que lograron del Poder Judicial de Puebla y desde el pasado martes 1 de febrero el Campus de la UDLAP, está abierto para regresar a la normalidad y retomar las clases presenciales, como lo demandan los universitarios.
Ríos Piter comentó que conocía perfectamente el problema que enfrenta la UDLAP por la lucha jurídica provocada por el desfalco a la Fundación Mary Street Jenkins y de los malos manejos al interior de la universidad.
“Lo hice de buena fe con el ánimo de colaborar y dar lo mejor de mi parte, desafortunadamente me di cuenta de que se trata de un conflicto que podría llevar años, por un lado a uno de las partes le fue entregado el campus universitario como medida para evitar que se siguiera afectando el patrimonio de la fundación Mary Street Jenkins, a la otra se le ha permitido mantener la administración de las cuentas bancarias de la UDLAP”.
