Tulancingo de Bravo, Hidalgo.- Por no acatar horario de cierre de establecimiento, así como por dar servicio, incluyendo venta de bebidas alcohólicas a menores de edad, en el transcurso del año pasado fueron aplicadas cinco sanciones económicas, así como un cierre parcial a antros instalados en la ciudad.
Viridiana Hernández Hernández, directora municipal de Reglamentos y Espectáculos refirió que las multas han sido sobre todo por el servicio a los menores de edad a espacios que están autorizados para atender a mayores de 18 años.
Aseguró que en el transcurso del 2018 se recibieron varios reportes de presunto servicio a los menores, pero al momento de verificar, no hubo localización de casos, salvo los mencionados.
Consideró que el aspecto físico provoca las confusiones, señalando la funcionaria que tras comprobación de edad, sobre todo por medio de identificación, se confirma que los parroquianos sí están en edad para ser atendidos en antros y bares.
Sin embargo, sí fueron aplicadas el año pasado un total de cinco sanciones económicas, así como una clausura temporal por quince días del establecimiento en donde se confirmó la venta de bebidas alcohólicas en antros y bares hacia menores de edad.
No hubo registro de clausuras definitivas.
Sin embargo, la funcionaria advirtió que existen locales que están bajo vigilancia luego de recibirse varios reportes respecto al presunto servicio a menores de edad.
“Quizá los dueños o los responsables de esos negocios piensan que por el término del año, ya finalizó el proceso de supervisión, pero queremos aclarar que esto no es de tiempos, es permanente”.
Recordó que el procedimiento implica dos sanciones económicas, que a su vez son una suerte de apercibimiento, y en el tercer reporte, además de la multa, se realiza clausura temporal por quince días del establecimiento.
De persistir las irregularidades en el servicio, se llega a la clausura definitiva, enfatizando la funcionaria que el año pasado no hubo registro alguno de cierres definitivos.
Dijo que sí han existido amenazas al personal de inspección, e incluso sobornos, los que implican endurecimiento de la sanción para el infractor.
Por Daniel Martínez Martínez
