La NASA ha confirmado el acercamiento de 5 asteroides a la tierra en esta semana, por lo que un grupo de científicos han propuesto una nueva estrategia para lidiar con este tipo de amenazas en caso de que sus acercamientos sean peligrosos.
El tamaño de cada uno de los asteroides varía, desde el de un autobús, hasta el de un edificio residencial, tres de estas rocas fueron detectadas en los últimos dos meses.
Por fortuna lo más cercano que se prevé que pasen por la tierra una de ellas es a 1.2 millones de millas; es decir 1.9 millones de kilómetros lo equivalente a 5 veces la distancia de la tierra a la luna.
Pero a pesar de la lejanía que tienen estos grandes objetos, un tamaño mayor a 150 metros, que se observa dentro un rango de 7.5 millones de kilómetros ya se considera potencialmente peligroso. La preocupación de la NASA es que uno de estos asteroides que se aproximan a la tierra esta semana, encajan en la categoría de ser un potencial peligro.
Por otro lado, un grupo de investigadores de la universidad de florida central, han propuesto un nuevo método para evitar que la humanidad siga el camino de los dinosaurios.
Su proyecto propone atar un asteroide peligroso a otra roca cercana, mediante el uso de un cable especial para desplazar su centro gravitacional y por consecuencia alterar su órbita evitando una colisión con la tierra.
El equipo decidió utilizar el asteroide BENNU como objeto de estudio, para realizar una simulación computarizada y así poder calcular el resultado de la dinámica en diversas condiciones iniciales, concluyendo que podría ser un método viable para defender al planeta.
Sin embargo, uno de los principales problemas que detectaron los investigadores es que para llevar a cabo con éxito este proyecto, es necesario una detección y acción temprana; por lo que han considerado, aunque aún no los han utilizado, el uso de una carga nuclear para fragmentar el asteroide, o un cohete para desviar el objeto espacial