Tula de Allende, Hidalgo.- Concesionarios y conductores del servicio taxi de la región Tula analizan ampararse para no cumplir con las nuevas disposiciones que les exige el Gobierno Estatal para el cambio de cromática y colocación de taxímetros.
Así lo informó el coordinador del Frente de Taxis Unidos Tula, Alberto Tapia Serrano, señalando que las implementación de la tecnología afectan la economía de los permisionarios y los conductores, ya que explicó que el gobierno del estado, a través de la Secretaría de Movilidad y Transporte quieren que ellos se encarguen de todos los gastos que implica la nueva modalidad.
Señaló que sólo la solicitud para el cambio de cromática tiene un costo de 520 pesos, mientras que por el taxímetro son 420 pesos de renta mensual y otro tanto por el botón de pánico y otros servicios.
El líder transportista indicó que, a su parecer, las nuevas disposiciones no eran necesarias y se pusieron con el pretexto de no dejar entrar a la entidad a plataformas como Uber, pero consideró que en realidad se trata de una medida recaudatoria.
Agregó que la publicación que se hizo en el Periódico Oficial del Estado sobre la nueva cromática en taxis del estado, refiere que es una medida opcional, y no obligatoria, pues no se trata de una ley sino de un acuerdo en donde a los concesionarios no los tomaron en cuenta.
Por Daniel Martínez Martínez