Valle de Tulancingo, Hidalgo.- Nuevamente se reportan asaltos o por lo menos, intentos de estos en la vía Tulancingo – Pirámides, señalando los afectados que la incidencia ocurre ahora en el tramo entre Acelotla y Singuilucan.
En este último punto, las agresiones ocurren a la altura de la Autopista Arco Norte, siendo arrojados desde el puente de dicha vialidad, diversos objetos, como trozos de metal o piedras.
Lo anterior con objetivo de dañar a algún vehículo que pase en ese momento por la vialidad, obligando a que detenga su marcha, y asaltar al conductor, así como al resto de sus acompañantes.
Son por lo menos cuatro casos en las dos semanas más recientes, con testimonios compartidos por automovilistas que transitaron por la vía carretera citada.
“Al pasar por Singuilican, a la altura del Arco Norte, cayó sobre el cofre de mi auto un pedazo de riel; pero no me detuve, porque sospeché que era un intento para robarme”, narró uno de los afectados.
Dos casos coincidieron en señalar que encontraron piedras en diversos puntos del tramo carretero Acelotla – Singuilucan, logrando esquivarlas ante la sospecha de que era una mecánica para intentar asaltarlos.
En un testimonio más, la víctima señaló que circulaba a la altura de Acelotla, en los límites entre los estados de México e Hidalgo, cuando ocupantes de una motocicleta comenzaron a agredirle arrojando objetos para obligarle a detenerse.
Ante la posibilidad de que se tratara de intento de asalto, el conductor aceleró, dejando atrás a sus agresores.
En todos los casos las víctimas señalaron que no encontraron patrullas de Guardia Nacional para pedir ayuda, a su vez de reportar la situación.
La incidencia de asaltos o intentos sobre la carretera Tulancingo – Pirámides había disminuido durante el primer trimestre del presente año.
Desde mediados del pasado mes de abril volvieron a incrementarse los reportes ciudadanos al respecto de dicha incidencia delictiva
El momento más crítico de esta ocurrió a partir de mediados del año 2021, incluso con el registro de personas lesionadas que se resistieron al asalto.
Por Daniel Martínez Martínez
