La Administración del Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, vuelve a encender las alarmas entre los migrantes con la ampliación de las deportaciones rápidas a quienes hayan permanecido de forma ilegal en el país norteamericano por menos de dos años y en algunos casos, podría aplicarse la mediación de un juez.
La decisión, incluida en un documento del Departamento de Seguridad Nacional y que aparece ya en el Registro Federal, establece nuevas directrices para las deportaciones aceleradas.
Este nuevo movimiento de Donald Trump aparece mientras se mantiene todavía la amenaza de las redadas masivas, las cuales están vigentes ya desde el pasado 14 de julio y dirigidas a unos 2 mil migrantes con órdenes de deportación que, en algunos casos, no se presentaron a las audiencias en los tribunales de migración.