La Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJH) obtuvo la sentencia hacia José Luis H., de ocho años de prisión por violencia digital, dio a conocer la asociación civil Código Violeta, mediante sus redes sociales.

Pachuca de Soto, Hidalgo.- Se trata de la primera sentencia que se obtiene por dicho delito en la entidad, y la segunda a nivel nacional, pues apenas el pasado 27 de febrero, en Quintana Roo se dio la primera de este tipo.
En el caso del estado de Hidalgo, a José Luis H. se le encontró responsable de compartir imágenes de contenido sexual sin consentimiento, afectando a más de 540 mujeres y niñas.
El caso comenzó en 2021; la denuncia surgió tras el descubrimiento de un mercado digital de contenido sexual.
Desde ahí se difundían estas imágenes a través de repositorios en línea.
La sentencia se logra tras cuatro años de lucha, luego de que 43 de las víctimas realizarán su denuncia formal.
El material con el que él comerciaba sin el consentimiento de sus víctimas, se encontraba en un mercado de explotación sexual digital.
En Hidalgo, la violencia digital se castiga con hasta 6 años de cárcel, desde marzo de 2021, cuando el Congreso local aprobó, con 27 votos a favor y cero en contra, la Ley de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
La normativa impone castigos para quien videograbe, audiograbe, fotografie, imprima o elabore imágenes, audios o videos con contenido íntimo, sexual, erótico o pornográfico de una persona sin su consentimiento.
La pena podrá aumentar hasta la mitad, es decir, nueve años en total, cuando el delito sea cometido por el cónyuge, concubina o cualquier persona con la que la víctima haya tenido alguna relación sentimental.
Asimismo, en caso de que el violentador haya obtenido algún beneficio, lucrativo o represente un riesgo para la vida y o integridad de las víctimas.
Apenas, el pasado 27 de febrero, en Quintana Roo se dio la primera sentencia de este tipo, cuando un juez condenó a siete años y seis meses de prisión a Eduardo Augusto.
En este caso, al sentenciado se le encontró responsable de compartir a través de WhatsApp y Facebook un video en el que aparece en un momento íntimo con su víctima, mismo que fue publicado sin consentimiento de la misma en noviembre de 2021.