Conductores de servicios de transporte por aplicación están alzando la voz contra abusos cometidos por policías estatales. Según sus denuncias, muchos son detenidos sin justificación y enfrentan exigencias de sobornos. Esta situación se complica aún más con el uso de grúas que imponen tarifas exorbitantes por el arrastre de vehículos.
Un chofer afectado reveló que las grúas contratadas por el Gobierno Estatal pueden cobrar hasta cinco mil pesos por un traslado, muy por encima del costo habitual de aproximadamente ochocientos pesos. Esto ha causado un gran descontento entre los conductores.
Aunque no se oponen a ser detenidos si realmente han cometido una infracción, como la falta de placas, enfatizan que muchas detenciones son arbitrarias. “Nos detienen sin razón y luego nos piden dinero para dejarnos ir. Si no accedemos, nos amenazan con arrestarnos”, comentó uno de ellos.
A pesar de que este problema ha sido reportado a las autoridades, los conductores afirman que no se han tomado medidas. “El secretario de Seguridad nos dijo que no pueden intervenir porque las grúas son privadas, pero eso no es excusa. Si están abusando de la ciudadanía, deben actuar”, reclamó un denunciante. Los retenes policiales se colocan en lugares estratégicos durante la madrugada, lo que aumenta la vulnerabilidad de los choferes.