De marzo a mayo se podría tener mayor incidencia en las zonas forestales de la entidad
Alberto Dzib
La Protectora de Bosques del Estado de México (Probosque), informó que para 2025 se espera un incremento de entre 4 y 7 por ciento en el número de incendios forestales, en comparación con los datos registrados en 2024, cuando ocurrieron mil 205 siniestros que dañaron más de 35 mil hectáreas.
De acuerdo con la dependencia la mayoría de los incendios forestales son provocados por el factor humano y con base en el registro de otros años, el periodo crítico será del 1 de marzo al 15 de mayo.
Alejandro Sánchez Vélez, titular de Probosque, señaló que el incremento en el riesgo está relacionado con las condiciones climáticas, pues 2024 fue un año especialmente seco, con lluvias insuficientes y heladas que dejaron una alta cantidad de combustible en los bosques.
“Estamos en estado de alerta máxima desde el 19 de diciembre, porque el riesgo es alto debido a estas condiciones”, explicó.
El funcionario detalló que en 2024 los municipios con mayor incidencia de incendios fueron Ocuilan, Nicolás Romero, Villa del Carbón, Ixtapaluca y Valle de Bravo, mientras que los mayores daños ocurrieron en Temascaltepec, donde se afectaron 3 mil 431 hectáreas, y en Jilotzingo y Luvianos, con 2 mil 613 y mil 893 hectáreas dañadas, respectivamente.
Sánchez Vélez añadió que otro factor que impacta la salud forestal es la presencia de plagas. Durante 2024, se notificaron daños en 842 hectáreas por insectos descortezadores y en 5 mil 807 hectáreas por plantas parásitas, afectando más de 117 mil 900 metros cúbicos de madera.
Probosque hizo un llamado a la población para evitar acciones que puedan provocar incendios forestales, destacando que la mayoría tienen origen humano.
Además, advirtió que se intensificarán las medidas de vigilancia y se aplicarán sanciones a quienes sean responsables de provocar estos eventos.
