El ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva pronunció este sábado 7 de abril su último discurso antes de entregarse a la policía para cumplir una condena a 12 años y un mes de cárcel por corrupción.
Su discurso lo realizó en el municipio Sao Bernardo do Campo desde unas instalaciones del Sindicato de los Metalúrgicos, organización que presidió en la década de 1970 y donde inció su carrera:
A continuación, el discurso de Lula da Silva traducido en español:
En 1979, este sindicato hizo una de las huelgas más extraordinarias. Nosotros conseguimos hacer un acuerdo con la industria automotriz que fue tal vez el mejor posible. Yo tenía un comité de fábrica con 300 trabajadores. El acuerdo era bueno. Y resolví pedir al comité de fábrica ir más temprano para hablar con la peonada. Hacía la asamblea a la mañana para evitar que el personal bebiera un poquito a la tarde, porque cuando bebemos un poquito, nos vovemos más osados.
Aún así no lo evitaba porque los compañeros llevaban un litro de coñac dentro de la valija, y cuando yo pasaba, me tomaba una copita papra que la garganta quede mejor, cosa que hoy no sucedió.
Pero bien, nosotros comenzamos a tratar el acuerdo en una votación y las 100 mil personas en el Estadio de Villa Euclides no acaptaban el acuerdo. Era el mejor posible. No perdíamos el día de cacaciones, no perdíamos el aguinaldo y teníamos el 15% de aumento. Pero la peonada estaba radicalizada, y staba tan radicalizada que qería el 83% o nada. Lo conseguimos. Y pasamos un año siendo llamados “traidores” por los trabajadores.
…
Lo que les estaba diciendo era que no conseguimos aprobar la propuesta que consideraba buena. Y la gente entonces pasó de desacreditar a la dirifencia del sindicato. Y yo iba a la puerta de la fábrica y nadie paraba, y la prensa escribía: “Lula habla para los oídos sordos de los trabajadores”.
Nosotros tardamos un añi para recuperar nuestrio prestigio en la categoría y me quedé pensando con un aire vengativo: “los trabajadores dicen que pueden hacer 100 días de huelga, 400 días de huelga, que ellos van hasta el final, pues voy a ponerlos a prueba en 1980”.
E hicimios la mayor huelga de nuestra historia, la mayor huelga: 41 días de huelha. A los 17 días de la huelga voy preso, y los trabajadores comenzaron, después de algunos días, a pinchar la huelga. Y nosotros entonces,… yo sé que (el comisario Romeu) Tuma, sé que el doctor Almir (Pazzaianotto), sé que el doctor (Teotonio) Vilela cuando venían a la cárcel y me decían: “ey, Lulam tenés que levantar la huelga, usted tienen que aconsejarles para levantar la huelga”. Y yo les decía: “no voy a levantar la huelga, los trabajadores lo van a decidir por cuenta propia”.
El dato concreto es que nadie aguantó 41 días, porque, en la práctica, el compañero tenía que pagar la leche, tenía que pagar la cuenta de lluz, tenía que pagar el gas. La mujer comenzó a reclamar el dinero del pan, entonces él comenzó a sufrir presión y no aguantó.
Pero es curioso porque, en la derrota, ganamos mucho más, sin ganar económicamente, que cuando ganamos económicamente. Significa que no es el dinero que resuelve el problema de una huelga. No es el 5%, no es el 10%, es lo que está metido de teoría pólitica, de conocimiento político, y de tesis política en una huelga.
Ahora nosotros estamos casi en la misma situación. Casi en la misma situación. Me están procesando y he dicho claramente: “En el proceso del apartamento, yo soy el único ser humano procesado por un apartamento que no es mío”. Y ellos saben que O Globo mintió cuando dijo que era mío. La Policía Federal del Lava Jato, cuando hizo la investigación, mintió que era mío. El Ministerio Público, cuando hizo la acusación, mintió diciendo que era mío. Y yo pensé que (el juez) Moro lo iba a resolver, y mintió diciendo que era mío. Y me condenó a nueve años de cárcel.
Es por eso que soy un ciudadano indignado. Porque yo ya hice muchas cosas a mis 72 años, pero no les perdono por haber instalado en la sociedad la idea de que soy un lagrón.
Dieron prioridad a los delincuentes que hicieron (al muñeco) “Pixuleco” y lo pasearon por el Brasil entero. Dieron prioridad a los delincuentes que nos decían (el insulto) “petralhas”. Dieron prioridad a la creación de un clima de guerra negando la política en este país.
Y yo digo todos los días: ni uno de ellos, ni uno de ellos, tiene el coraje o duerme con la conciencia tranquila de la honestidad, de la inocencia con la que yo duermo. ¡Ni uno de ellos! [aplausos].
Yo no estoy por encima de la Justicia. Si no creyera en la Justicia, no habría hehcho un partido político. Yo habría propuesto una revolución en este país.
Pero yo creo en la Justicia. En una Justicia justa, en una Justicia que somete a votación un proceso basado en autos de procesamiento., basado en informaciones de las acusaciones, de las defensas, y en pruebas concretas sobre el “arma del crimen”.
…
Lo que puedo admitir es un fiscal que hizo un PowerPoint y fue a la televisión a decir que el PT es una organización criminal, que nació para robar a Brasil y que Lula, por ser la figura más importante del partido, es el jefe. Y, por lo tanto, si Lula es el jefe, (no puedo admitir) que el fiscal diga: “Yo no necesito de pruebas, yo tengo la convicción”.
Yo quiero que él guarde esa convicción suya para sus compinches. ¡Para los secuaces de ellos, y no para mi! ¡No para mi!
Ciertamente, un ladrón no exigiría pruebas. Estaría comprometido, con la boca cerrada, escurriéndose para que la prensa no hable de su nombre.
Yo tengo más de 70 horas de noticieros trirturándome. Yo tengo más de 70 tapas de páginas de diarios y noticias atacándome. Tengo también (al canal) “Record” atacándome. Tengo a (la red televisiva) “Bandeirantes” atacándome. Tengo también a las radios del interior. Y lo que ellos no se dan cuenta es que mieentras más me atacan, ¡más crece mi relación con el pueblo brasilero!
No les tengo miedo. Ya dije que me gustaría hacer un debate con el juez Moro sobre la denuncia que me hizo. ¡Me gustaría que me muestre algún tipo de prueba! Ya desafié a los jueces del tribunal TRF-4 : ¡que vayan a un debate a la universidad que quieram con el público que quieran, para que prueben cuál es el crimen que cometí en este país!
A veces tengo la impresión, y la tengo porque soy un constructor de sueños… Hace mucho tiempo atrás soñé que era posible gobernar el país incluyendo a millones de personas pobres en la economía, incluyendo a millones de personas en las universidades, creando millones y millones de empleos en el país.
Yo soñé.
Yo soñé que era posible que un metalúrgico, sin diploma en la universidad, cuidaría más la educación de los diplomados y egresados que gobernaron este país.
Yo soñé que era posible disminuir la mortalidad infantil llevando leche, “feijao” y arroz para que los niños pudiesen comer todos los días.
Yo soñé que era posible llegar a los estudiantes de las periferias y ubicarlos en las mejores universidades del país. Para que la gente no tenga… para que no tengamos jueves y fiscales solo de la élite.
De aquí a poco vamos a tener jueces y fiscales nacidos en la favela de la Heliópilis, nacidos en Itaquera, nacido en la periferia… Vamos a tener mucha gente del MTST (Movimiento de los Trabajadores Sin Techo) y de CUT (Central Única de los Trabajadores) graduados.
Ese crimen cometí.
Ese crimen cometí y es ese crimen el que ellos no quieren que cometa más. Es por culpa de ese crimen que ya tengo unos diez procesos conrta mi. Y es por esos crímenes, de colocar pobres en la universidad, negros en la universidad, a los pobres a comer carne, a comprar coche, a viajar en avión, a hacer su pequeña agricultura, ser microemprendedor, tener su casa propia… Si ese es el crimen que he cometido, quiero decir que voy a seguir siendo criminal en ese país porque voy a hacer mucho más. Voy a hacer mucho más.
[Cántico: “Lula, guerrero, del pueblo brasileño”]
Compañeros y compañeras, En 1990, en 1986m fui el diputado constituyente más votado en la historia del país. Y nosotros, descubrimos, que del PT . Manuela, compañeros, Ivan era del PT en esa época- , había una desconfianza que sólo tenía poder en el PT quien tenía mandato. Quien no tuviera mandaro era tenido…
Entonces, compañeros, cuando me di cuenta de que el pueblo desconfiaba, que sólo tenía valor en el PT quien era diputado, Manoela [D’Avila] y Guilherme [Boulos], ¿saben lo que hice? Dejé de ser diputado. Porque yo quería probar al PT que iba a seguir siendo la figura más importante del PT sin tener mandato. Porque si alguien quiere ganarme a mi en el PT, sólo tienen una manera: trabajar más que yo y gustarle al pueblo más que yo. Porque si no le gusta, no va a ganar.
Pues bien: ahora estamos en un trabajo delicado. Yo tal vez viva el momento de mayor indignación que un ser humano vive. No es fácil lo que sufre mi familia. No es fácil lo que sufren mis hijos. No es fácil lo que sufrío Marisa y yo quiero decir que la anticipación de la muerte de Marisa fue la desfachez y la maldad que la prensa y el Ministerio Público cometieron contra ella. Estoy seguro. Esta gente creo que no tiene hijo, no tiene alma y no tiene noción de lo que siente una madre o un padre cuando ve a un hijo masacrado, cuando ve a un hijo siendo atacado.
Entonces, compañeros, yo resolví levantar la cabeza. No pienen que estoy contra el Lava Jato, no. El Lava Jato, si atrapa a delincuentes, tiene que agarrar al delincuente que robó y arrestarlo. Todos nosotros queremos eso. Todos nosotros decíamos: “La Justicia sólo atrapa a los pobres, no atrapa a los ricos”. Todos lo decíamos. Y quiero que continúe atrapando ricos. Yo quiero. Ahora, ¿cuál es el problema? Es que usted no puede hacer jucio subordinado a la prensa. Porque en el fondo, en el fondo, usted destruye a las personas en la sociedad, en la imagen de la gente, y luego los jueces van a juzgar y van a decir “yo no puedo ir contra la opinión pública, porque la opinión pública está pidiendo una cacería”.
Quien quiera votar sobre la bade de la opinión pública, suelte la toga y vaya a ser candidato a diputado, escoja un partido político y vaya a ser candidato. Ahora bien, la toga es el empleo vitalicio. El ciudadano tiene que votar sólo con base en los autos del proceso, por lo demás creo que un ministro de la Corte Suprema no debería dar declaración de cómo va a votar. En los Estados Unidos termina la votación y usted no sabe por quién votó un ciudadano exactamente para que él no sea víctima de presión.
Imagina a una persona siendo acusada de homicidio y no fue el asesino. ¿Qué quiere la familia del muerto? Que esé muerto, que sea condenado. Entonces el juez tiene que tener, a diferencia de nosotros, la cabeza más fría, más responsabilidad de hacer la acusación o de condenar. El Ministerio Público es una institución muy fuerte. Por eso esos chicos que entran muy jóvenes hacen un curso de derecho y después hacen tres años de concurso porque el padre puede pagar, esos chicos necesitaban conocer un poco de la vida, un poco de política para hacer lo que ellos hacen en la sociedad brasileña. Hay una cosa llamada responsabilidad.