El huracán John tocó tierra en las costas de Oaxaca y Guerrero la noche del lunes a las 21:20 horas, tras haberse intensificado rápidamente a categoría 3 en menos de 24 horas. El fenómeno pasó de ser una tormenta tropical a convertirse en un huracán mayor, con vientos sostenidos de 110 km/h y rachas de hasta 140 km/h. El impacto fue devastador para la región, particularmente al noreste de Acapulco, donde su centro se ubicó a solo 45 kilómetros de la ciudad.
El presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió a la población unas horas antes de que John tocara tierra, instando a la gente a resguardarse en zonas altas y priorizar la seguridad. “Lo material se repone, la vida no”, escribió en su cuenta de X.
Las autoridades han declarado zonas de prevención desde Acapulco hasta Huatulco y Salina Cruz, y se han emitido alertas por lluvias intensas, vientos fuertes y alto oleaje en varios estados, incluyendo Chiapas, Veracruz y Michoacán. El SMN insiste en seguir las recomendaciones del Sistema Nacional de Protección Civil para evitar mayores daños.
Finalmente, John se degradó a tormenta tropical a las 03:15 horas, seis horas después de su impacto, pero los efectos en las zonas afectadas aún persisten, y las autoridades mantienen un monitoreo activo ante el riesgo de inundaciones y deslaves.