Violeta García Rojas
El virus Coxsackie encendió las alertas sanitarias en Puebla, luego de que autoridades estatales confirmaran 18 casos: en el Centro Escolar Lázaro Cárdenas, en Izúcar de Matamoros, y uno más en la capital poblana, en Amalucan.
Ante la situación, el secretario de Gobernación estatal, Samuel Aguilar Pala, anunció la suspensión de clases presenciales en los planteles afectados. A partir de ahora, las actividades educativas se realizarán de manera virtual hasta nuevo aviso.
Ambas escuelas pertenecen al nivel preescolar, y aunque los menores contagiados se encuentran estables, se han intensificado las medidas de prevención. Padres de familia realizan labores de limpieza y desinfección, mientras que personal de salud evalúa el alcance del brote.
“Las clases no se reanudarán hasta que el brote esté completamente controlado”, afirmó Aguilar Pala, quien aseguró que se mantiene un monitoreo constante en los centros educativos.
Los estudiantes se mantienen en sus hogares desde el jueves 2 de octubre, realizando actividades educativas a distancia durante un periodo de 10 días, con el objetivo de proteger su salud y evitar la propagación del virus.
Por otra parte, se confirmó un caso aislado del virus en la primaria “Ignacio Zaragoza”, ubicada en la Unidad Habitacional Amalucan, Puebla capital.
El alumno permanece en su domicilio bajo el cuidado de sus padres, mientras que el personal de la escuela realizará trabajos de limpieza y desinfección en el salón afectado, con la suspensión temporal de las clases presenciales.
