Aunque las publicaciones fueron eliminadas poco después, el daño ya estaba hecho.
Ian Arriaga
Una nueva polémica enfrenta a Taylor Swift y Kanye West, luego de que el rapero publicara mensajes inapropiados en redes sociales, en los que hizo afirmaciones gráficas sobre supuestos encuentros íntimos entre la cantante y otros artistas como Harry Styles y Justin Bieber. Aunque las publicaciones fueron eliminadas poco después, el daño ya estaba hecho.
La cantante, respaldada por su equipo legal, emitió una orden de cese y desistimiento en contra de West, alegando que sus declaraciones eran “falsas, difamatorias y totalmente fuera de lugar”. Según el Daily Mail, Swift decidió tomar acciones legales ante lo que consideró una clara violación a su intimidad y reputación.
“Esta vez ha ido demasiado lejos. Sus afirmaciones no solo son falsas, también son difamatorias”, señaló una fuente cercana a la artista al medio británico.
En el mensaje que desató la controversia, West describía una escena ficticia entre Swift, Styles y Bieber, usando un lenguaje que los abogados de la cantante calificaron como ofensivo y perjudicial para su imagen. La reacción no se hizo esperar. Travis Kelce, pareja de Taylor, expresó su molestia y, según fuentes, estaría dispuesto a confrontar al rapero “de hombre a hombre”.
También Harry Styles habría mostrado su indignación y estaría considerando hablar públicamente sobre el tema si fuera necesario.
Por su parte, los fans de Taylor han manifestado su apoyo incondicional y han exigido medidas severas contra West, señalando que esto ya no es un simple conflicto entre celebridades, sino un caso claro de acoso y violencia digital.
Mientras la batalla legal se prepara, el episodio reaviva una larga historia de desencuentros entre Swift y West, recordando que en el mundo del espectáculo, los conflictos públicos pueden tener consecuencias muy reales.