Como resultado de la crisis del coronavirus, también se debe tomar en cuenta asegurar un destino final adecuado a cubrebocas, guantes, pañuelos desechables, papel higiénico, ropa personal y desechable, además de batas, sabanas contaminadas por pacientes y personal médico que ha tenido contacto con la enfermedad.
Estos elementos deben tener un tratamiento especial y bajo ninguna circunstancia deben ser integrados a los residuos que cotidianamente se generan en hogares y centros hospitalarios, además de envases pet de gel antibacterial, frascos de alcohol y cloro que en las últimas semanas ha aumentado exponencialmente su uso y que tampoco están siendo recolectados de forma adecuada.
Debido a la emergencia sanitaria ocasionada por la Covid 19, ha incrementado la demanda de estos elementos, por lo cual es urgente que tanto autoridades del sector salud como ambientales lancen una campaña respecto a su buen manejo, tomando en cuenta además que en pocas semanas inicia la temporada de lluvias, y muchos de estos desechos que ya hoy vemos tirados en las calles, acabarán en alcantarillas y drenes, causando además de contaminación, inundaciones en zonas urbanas.
Previendo que por la emergencia sanitaria pueda presentarse una mayor demanda de este tipo de residuos es indispensable habilitar centros de acopio donde se garantice la disposición final adecuada, con la intención además, que los trabajadores del servicio de limpia y pepenadores en basureros y tiraderos a cielo abierto no corran el riesgo de contagiarse de Covid 19.
En algunos estados del país, ya fueron instalados “botes rojos o bolsas rojas” donde se colocan desechos orgánicos de hospitales y domésticos además de ropa de cama que tuvo contacto con fluidos de enfermos con Covid 19, posteriormente son enviados a hornos crematorios donde el contenido se reduce a cenizas reduciendo el riesgo de más contagios.
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Heidy Wagner Laclette
