El Presidente Electo y su equipo presentan un “plan con austeridad, servicio ,y cero tolerancia al robo”
Berenice León
En una reunión clave para preparar el próximo gobierno municipal de Atlacomulco, el Presidente Electo, Nicolás Martínez Romero, delineó los principales objetivos de su administración junto a su equipo de trabajo.
Con un enfoque en la transparencia, el ahorro y la eficiencia, Martínez Romero reiteró que en su mandato buscará transformar al municipio y responder a las expectativas de los atlacomulquenses.
Entre las iniciativas presentadas, se habló de la creación de una Unidad de Verificación Administrativa con al menos seis verificadores y diez notificadores, que fortalecerán la transparencia y el orden.
Asimismo, se implementará una política de austeridad para reducir gastos innecesarios, mientras que el salario del presidente será donado a causas sociales, como el apoyo a niños con cáncer, esto adelantó el edil bajo esquema de transparencia.
En materia de sostenibilidad, la administración invertirá en energías limpias, buscando ahorrar recursos para destinarlos a obras públicas. Además, se adoptará una postura de “cero tolerancia al robo”, promoviendo una gestión eficiente de los recursos públicos.
Otro punto central será la capacitación del personal, con el objetivo de certificar entre el 60% y el 70% de quienes atienden directamente a la población. De igual forma, se diseñará una estrategia para incrementar los ingresos municipales sin afectar a los ciudadanos.
“Tenemos que entregar resultados porque la gente que nos eligió tiene grandes esperanzas en nosotros. Este será el mejor gobierno de la historia de Atlacomulco”, afirmó Nicolás Martínez.
Con este plan se acotó que el nuevo gobierno municipal busca marcar un cambio en la administración pública y mejorar la calidad de vida de los habitantes de Atlacomulco.