Valle de Tulancingo, Hidalgo.- Los municipios de la región carecen de reglamentos para la tenencia de mascotas, donde se especifiquen derechos y obligaciones respecto al manejo de animales caseros, por lo que a su vez, no hay especificaciones de sanciones en caso de omisiones o faltas al respecto.
El planteamiento fue realizado por César Gutiérrez Chávez, titular de la Jurisdicción Sanitaria Tulancingo, luego de registrarse ataque de perros hacia una mujer de la tercera edad, que le privó de la vida, además de ser devorada por los canes.
El funcionario señaló que en el primer semestre de éste año, se han registrado 183 ataques, sobre todo de perros en situación de calle, esperando que en lo restante del 2016, se presenten otros 150 ataques, aproximadamente, de acuerdo a la tendencia histórica al respecto.
“En unos ochenta casos, nos encontramos que los animales tienen dueño, y en otros cincuenta, aproximadamente, creemos que están en la misma situación, pero no hay manera de sancionar a los responsables, pues la Ley Estatal de Tenencia de Mascotas, no incluye nada al respecto, y en los municipios de la región, no hay reglamentación en el tema”.
Aunque en un primer momento se señaló que la jauría, conformada por unos diez canes, era de un solo dueño, investigaciones posteriores señalan que son varios los propietarios.
“Eso prueba que no hay responsabilidad en la tenencia de mascotas, los dejan en la calle todo el día, sin medir consecuencias, y en el mejor de los casos, duermen en las noches en domicilio”.
Por su densidad poblacional, es Tulancingo el municipio donde se registran la mayoría de las agresiones, seguido de Cuautepec, Santiago Tulantepec y Singuilucan.
Por lo que consideró importante, incluso urgente, que se revise el tema, lo que espera se encuentre en la agenda de las Asambleas Municipales que entrarán en funciones el próximo mes de septiembre.
En cuanto al ataque de la jauría, registrado la tarde noche del martes 5 de julio, Gutiérrez Chávez consideró que la causa más probable, es porque los perros se encontraban en celo, perseguían una hembra, cercana físicamente a la mujer ahora fallecida, y al defenderse, la mordieron, hasta causarle la muerte, y posteriormente comenzaron a devorarla.
Por Daniel Martínez Martínez