Violeta García Rojas
La Fiscalía General del Estado investiga el contenido del video, que grupo delictivo publicó, con la confesión de César Eduardo, “empresario” levantado, torturado, decapitado y abandonado en el C5i, luego de corroborar que la camioneta Porsche, en la que se transportaba, es aún propiedad de un Subdirector de Vialidad Estatal. Así lo confirmó, el Fiscal Especializado en Desaparición de Personas, Alejandro García Badiola. En conferencia de prensa, subrayó que este día se corroboró, a través de la confronta de perfiles genéticos, que los restos hallados en el estacionamiento de C5i, junto a un auto incendiado, corresponden a la César Eduardo, de 24 años de edad.
Precisó que hay información suficiente para determinar que el móvil del crimen es una lucha entre grupos delictivos, para apoderarse de territorio. Dijo que se realizan diversos actos de investigación, para esclarecer la privación de la libertad y de la vida de César Eduardo G., que se perpetró el 8 de septiembre en la Reserva Territorial Atlixcáyotl, en las afueras de un conocido restaurante, donde fue interceptado por cuatro hombres armados, en un automóvil compacto.
Un día después, de acuerdo con la publicación en redes sociales de un video, en el que se observa a cinco hombres con vestimenta táctica y armados, exhiben al “empresario” César Eduardo Garrido Celaya, de 24 años de edad, (a) “El Pelón”, con los ojos vendados y narrando que colaboraba con Agustín Groth, alias “El Pilas”, y Arturo, alias “La Mano”, dedicados al robo de camiones con mercancía en las autopistas y carreteras. Otro de sus cómplices, citó Cesar Eduardo, es “El Checitas” y/o “El Negro”, encargado de desmantelar las unidades, mientras la mercancía la comercializaba en otros Estados. La víctima, según las indagatorias, rentaba una bodega, donde se guardaban camiones con mercancía robada.
El video, publicado por el grupo delictivo, es parte de la investigación y corrobora una serie de hipótesis, sin mencionar que hay investigación contra elementos de la Guardia Nacional, una vez que César Eduardo, señaló que otro hombre (a) “El Rojo”, se encargaba de entregar 50 mil pesos, por cada golpe en las autopistas. Finalmente, sobre la camioneta, en la cual se transportaba la víctima, era propiedad de un mando de Vialidad del Estado, quien, presuntamente, la había vendido. Sin embargo, no se la había pagado en su totalidad y, por ello, la recogió en el lugar donde fue levantado César Eduardo.